Luces, cámaras y acción. Los concursos del Carnaval dedicado a Nueva York quedaron oficialmente inaugurados en la noche de hoy jueves con la celebración de la primera fase de murgas infantiles.
Con un recinto ferial prácticamente vacío salvo en la parte frontal del escenario, como viene siendo habitual desde hace años, comenzó la primera cita de los murgueros más pequeños, que pudieron disfrutar de sus 20 minutos de actuación tras tantos meses de esfuerzo.
Con la escenografía terminada in extremis actuaron Lenguas Largas, El Cabito, Redoblones, Distraídos, Carricitos y Sofocados.
LENGUAS LARGAS (2003)
Romper el hielo nunca es fácil y lo cierto es que los del mercado de La Salud supieron hacerlo con creces en su entrada. Con unas voces algo temblorosas en su inicio por los nervios, se presentaron hablando de su fantasía, inspirada en las criaturas del bosque. Tras su presentación sonó en el Recinto uno de los pasacalles más bonitos “Soy un murguero diferente”.
En su tema se transformaron en fotógrafos para retratar la realidad que viven y el entorno que les rodea. Tras contextualizar, se lanzaron a rescatar un trabajo que les habían pedido para clase con el objetivo de hablar sobre los dialectos y defender que no es algo relevante, que “lo único que importa es la comunicación”. De ahí dieron un salto al pasado para hablar del revelado de las fotografías en papel, lo que utilizaron para criticar los filtros y el postureo que se ve en las redes sociales en la actualidad. Concluyeron la canción paseando por los barrios de Santa Cruz, en los que las fotos les quedaron “feas de verdad”, criticando de esta manera el abandono que sufren.
Con una actuación que fue de menos a más consiguieron firmar con dignidad la primera actuación del 2023. En su tema, que destacó en algunos puntos por su crítica, el planteamiento inicial se fue perdiendo a lo largo de la canción, aunque lo recuperaron al final.
EL CABITO (1980)
Con muy buenas voces, comenzaron su tiempo de concurso recordando cómo era el Carnaval años atrás, lo que utilizaron para destacar que cada vez hay menos murgas infantiles y menos niños en ellas, concluyendo: “Luchamos todos juntos por salvaguardar la vida de mi carnaval”.
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Tras el pasacalles empezó su tema, en el que, como ya habían hecho en su presentación, viajaron al pasado para hacer una comparativa entre lo que era ser un niño en los años 80 y en la actualidad. Entre las reivindicaciones que hicieron estuvo la libertad, la unión y la compañía “los problemas se podían resolver en comunidad”. Siguieron rescatando juegos como el pilla pilla o Juan, Periquito y Andrés para reprochar que ya los niños no juegan en la calle y reflexionar sobre cómo las nuevas tecnologías han hecho que los niños cada vez compartan menos tiempo juntos. Concluyeron dando una clase de valores que se aprenden en el Carnaval: responsabilidad, generosidad, compromiso, tolerancia, humildad, gratitud y honestidad.
La murga de Angelita González afianzó la mejoría musical que comenzó a tener el año pasado gracias al montaje musical de Cristian Mapesi, también letrista. En su tema, nostálgico y crítico a partes iguales, disfrutaron de lo que supone ser un niño.
REDOBLONES (2017)
Con un Recinto un poco más lleno llegaron los ganadores del concurso en 2022. En su presentación, con voces magistrales, sacaron brillo a su fantasía de cigüeñas, diseñada por Josué Quevedo.
Tras su ya tradicional pasacalles y su “din, don” comenzó su tema en concurso, que presentaron con un vídeo en el que representaban que por haber suspendido asignaturas debían quedarse en la granja de su abuelo en vez de ir a Disney. Empezó el día en la granja, tras vestirse comenzaron a trabajar alimentando a los animales. Con la melodía de “en la granja de pepito” describieron los sonidos que hacen los distintos animales, lo que con ingenio convirtieron en la frase “hoy ponme un 10”, recado que le lanzaron al jurado. Continuaron poniéndose serios para comparar el huerto con la vida, en la que también hay que sembrar para recoger y tener esmero, concluyendo con que “si una cosecha sale mal, otra oportunidad y vuelves a sembrar”.
Los niños que dirige el carismático Joel Arias vinieron a revalidar su título con una actuación mágica en la que el toque crítico infantil fue ejecutado en una letra bien planteada y un hilo conductor claro. Sus buenas voces y dicción hicieron brillar más su canción.
DISTRAÍDOS (2006)
Desde Ofra llegaron los de Tana Rodríguez para empezar su actuación pidiendo libertad para los animales aprovechando su fantasía: “Que se eliminen las cadenas y jaulas”. Tras esto, su archiconocido pasacalles “un grupo de amigos con sangre murguera”.
En su tema Barriológico, escrito por Airam Bazzochi, comenzaron criticando a las televisiones que no emiten las murgas infantiles para pasar a comparar a personas de Santa Cruz con animales tirando de ironía, ingenio y crítica. Así, Bermúdez y Alfonso Cabello se convirtieron en perezosos porque van lentos y les dan pereza, lo que usaron para lanzar un dardo al concejal de Fiestas: “No hay que permitir que muera la murga infantil”. Continuaron con los mayores de la manada para hablar de los abuelos y del respeto que merecen para pasar a criticar a los que hacen bullying en escuelas, plazas y canchas comparándolos con hienas. Concluyeron sacando a pasear el orgullo de barrio y reivindicando que el ayuntamiento debe cuidar los barrios: “Barriológico es salir de noche a pasear y sentirme seguro”.
Distraídos marcó una buena actuación en la que la letra reinó. Tras un año complicado consiguieron mantener el nivel de Redoblones a base de crítica, ingenio e ironía con unas voces constantes y una buena dicción y puesta en escena.
CARRICITOS (1993)
Cumpliendo 30 años llegaron desde La Salud para comenzar su actuación pidiendo en su presentación que se cuide a la cantera: “Sin mí no hay carnaval”, lo que dio paso a su pasacalles.
En su tema relataron una tarde en la feria para hacer un tour por las distintas atracciones y puestos, que utilizaron para sacar filón a diferentes temas. En los cochitos aprovecharon para criticar a los conductores, que no respetan las normas de circulación ni tienen cuidado al volante, recordándoles que “muy atentos deben estar”. De ahí pasaron al paponazo, donde se quejaron de la gente incívica que se cuela en las colas. Finalizaron el tema en la noria, desde donde vieron el Recinto Ferial, que les recordó que cada vez hay menos murgas infantiles, trasladando el mensaje: “que vuelvan ya”.
En su aniversario destacaron por una letra divertida, amena e infantil que ejecutaron pasándolo bien y disfrutando con el público. Aunque reivindicativos en cuanto al concurso de murgas infantiles y el Carnaval, su paso por el escenario derrochó simpatía.
SOFOCADOS (1984)
Desde María Jiménez llegaron los niños de Dulce disfrutando de su fantasía en su presentación. Con unas voces compactas y mucha fuerzo ejecutaron su pasacalles.
En su tema, dedicado a las figuras, utilizaron diferentes elementos visuales como aros de luces para darle un plus a la letra, en la que pidieron apoyo para la cantera, recordaron los incendios para pedir hidroaviones y pidieron mayor control del bullying en las escuelas: luchemos por el bienestar de los niños”. Concluyeron su tema homenajeando a padres y abuelos.
Con la actuación más completa de la noche por su letra, buenas voces, puesta en escena y fuerza, Sofocados puso el broche de oro a una buena noche para el concurso de murgas infantiles.
Joel Ramos 