La murga ‘Reconecta2’ compuesta por 35 usuarios de la Unidad de Daño Cerebral Adquirido (DCA) de Hermanas Hospitalarias Acamán de Santa Cruz de Tenerife ha calado hondo entre el público tras su actuación sobre el escenario oficial de estas fiestas con “un mensaje de concienciación” y “a favor de un Carnaval más inclusivo”.
Esta es tan solo una de las distintas inciativas para visiblizar la discapacidad que incorporan este año las fiestas del carnaval canario. Victoria Arroyo es técnica de apoyo en el taller de logopedia y dirige a esta agrupación musical que se formó en 2018 con el fin de “poner en práctica pautas logopédicas como la respiración o la pronunciación”. “Es un ejercicio muy completo ya que hay que buscar una letra, encontrar palabras acertadas, hallar sinónimos; y al final pones esa cabecita en funcionamiento”, dijo a Servimedia.
Así ha sucedido con Paco Luis, un transportista de 60 años al que hace seis un accidente de moto le provocó un derrame cerebral. “Me siento muy feliz cuando estoy cantando. La murga me motiva mucho y esta experiencia te enseña a que vivir es muy importante”. La responsable del grupo musical insiste en que otros años han abordado temáticas sociales, pero en 2023 la palabra clave tenía que ser ‘inclusión’. “Nos hemos centrado en dar a conocer la realidad de estas personas con Daños Cerebral Adquirido porque muchos no saben lo que es. Conocemos el ictus, conocemos los traumatismos craneoencefálicos, pero cuando hablamos de DCA no se sabe lo que es ni lo que implica”.
SE LEVANTARON DE SUS SILLAS
Victoria, la directora de la murga, se emociona al recordar cómo algunos usuarios que “normalmente pasan sentados la mayor parte del tiempo en el momento de la actuación se levantaron (con ayuda) de sus sillas y cantaron durante ocho minutos de pie, dándolo todo”. Fue lo que le sucedió a Mónica Alonso, usuaria de la Unidad de DCA, que a sus 51 años padece fatiga crónica derivada de un aneurisma cerebral. “Me fatigo mucho y me daba un poco de miedo no dar la talla, pero la ilusión me pudo y aguanté perfectamente”.
Esta exeducadora infantil insiste en la importancia del trabajo de los centros especializados en DCA porque “el impacto psicológico que recibes cuando te ocurre es muy fuerte y de repente sientes una serie de afectaciones en tu cuerpo que no entiendes hasta que un profesional te ayuda a comprenderlas”. Precisamente la letra de la murga persigue que el público entienda y conozca la realidad de este colectivo. Además, anima a ponerse en la piel de los demás porque “vivimos sin ser conscientes de que existen este tipo de patologías”, asevera Mónica. “Yo tampoco, hasta que me sucedió”.
Tras la calurosa acogida en el Recinto Ferial de Santa Cruz de Tenerife la murga ‘Reconceta2’ ha recibido llamadas de diferentes ayuntamientos de la isla para volver a subir a escena, una cuestión por otra parte nada fácil como subraya Victoria ya que “todo lleva una logística gigantesca al tratarse de personas con problemas de movilidad y hay que buscar microbuses adaptados para los desplazamientos, etc., pero al final todo se consigue”.
No solo han alcanzado su objetivo, sino que lo han superado. “Me saltaron las lágrimas al verlos sobre el escenario y lanzar ese grito de inclusión a la sociedad”, recuerda Victoria y prosigue relatando que en ese momento lo tuvo claro: “¡Vamos a comernos el escenario!” (nada menos que el escenario donde cada año se celebra la elección de la Reina del Carnaval con aforo para 4.500 personas). Por esta razón Victoria insiste en que es “una ventana al mundo que había que aprovechar”.
Las historias de Pablo y Mónica vienen a confirmar “que la vida es un Carnaval”. No en vano, la letra de la murga reza: “Así es la vida/la tuya y la mía/y si mañana cambia/no la damos por perdida”.
TOCADOS ‘POR LA INCLUSIÓN’
Enrique Pérez es otro ejemplo de que el Carnaval de Canarias apuesta por la inclusión. En la localidad de Los Llanos de Aridane de la isla de La Palma, municipio tristemente conocido por ser el lugar más castigado por la erupción del volcán Cumbre Vieja, reside un joven talento del diseño con discapacidad intelectual.
Enrique de 22 años es un apasionado del Carnaval y lleva más dos años diseñando tocados para los desfiles. Asiste cada día al Centro Ocupacional Taburiente donde participa en diferentes talleres (jardinería, manualidades), aunque la pedagoga del lugar Sonia Fernández confiesa a Servimedia que “se pasa estas fechas de Carnaval bailando, porque baila muy bien, y dibujando bocetos”. Hasta el pasado año elaboraba estos tocados de manera privada, pero su nivel de sofisticación y profesionalidad son tan altos que el ayuntamiento de Los Llanos decidió contar con él para un desfile dentro del programa de las fiestas de don Carnal.
A Enrique el éxito de sus tocados no se le ha subido a la cabeza y asegura que está sorprendido por la reacción de la gente. “He aprendido yo solo” y confiesa que encuentra la inspiración “por la noche, soñando”. El joven que quiere dedicarse profesionalmente al diseño estos días ultima los detalles de su disfraz: “Este 12 de marzo me presento al concurso de ‘Rey del Carnaval’ de mi centro con una fantasía que se titula ‘Recuerdos de un rey’ y ahora estoy confeccionándolo”.
En su casa el joven artista dispone de una habitación que es prácticamente su taller donde almacena plumas, pedrería y alambre para construir el armazón de unos tocados, cada vez más altos y espectaculares, que dejan boquiabiertos a profesores, compañeros y público en general. Tocados que ascienden al ritmo de su popularidad.