De nuevo una cabalgata. Y otra vez en el marco de los retrasos en el abono de las horas extraordinarias que realizan los agentes de la Policía Local. El sindicato Unión Sindical de Policía y Bomberos (USPB) ha exigido a la alcaldesa de Las Palmas de Gran Canaria, Carolina Darias, que tome cartas en el asunto y desbloquee el pago que el Consistorio debe a los agentes porque el malestar en el cuerpo policial es creciente y ya hay trabajadores que han manifestado su intención de no apuntarse como voluntarios al dispositivo especial que se necesita para garantizar la seguridad en el próximo carnaval.
«Si no sale adelante el acuerdo de las cuatro jornadas de libre disponibilidad por parte de la Jefatura de la Policía Local y no se aprueba el pago de las horas extraordinarias en la nómina de febrero, probablemente no dispondrán de los suficientes efectivos para las cabalgatas del carnaval», advierte el secretario general de USPB, Víctor García.
«En los próximos carnavales y especialmente en la cabalgata del sábado 17 de febrero, a día de hoy es imposible garantizar que se dispondrán de los efectivos necesarios para su realización», insiste el representante de los agentes, «hemos solicitado tener una reunión con todos los responsables, siendo la alcaldesa la que tiene que confirmarnos si las horas extras se abonarán en febrero y si tomará la iniciativa para que la concejala de Personal, Esther Lidia Martín, saque adelante el acuerdo firmado y publicado desde hace un año sobre las cuatro jornadas de libre disponibilidad que garantizan la movilización en eventos, en unas condiciones solventes para atender la seguridad de eventos y las aglomeraciones de ciudadanos».
La destitución de un jefe
La situación a la que se enfrenta la gestión de la seguridad no es nueva. Hay que recordar que, en 2019, un informe-denuncia sobre los incumplimientos en materia de seguridad ocurridos en la celebración de la cabalgata del carnaval y del entierro de la sardina, que fue firmado por el entonces responsable máximo de la Policía Local, Carlos Saavedra Brichis, acabó con su destitución al frente del Cuerpo por pérdida de confianza.
Y lo mismo ha pasado en otras grandes celebraciones, donde el Ayuntamiento de Las Palmas de Gran Canaria ha tenido que recurrir a la contratación de seguridad privada para organizar eventos como la celebración de los fuegos de San Lorenzo, actos del carnaval o la cabalgata de la víspera de Reyes.
«Es una irresponsabilidad», considera Víctor García, «estamos tirando de seguridad privada para parchear las carencias, teniendo en cuenta, además, que la labor que desempeña la seguridad privada no tiene nada que ver con la que despliegan las fuerzas y cuerpos de seguridad».
Sin atender las llamadas al 092
En el último pasacalles de los Reyes Magos, el de este mismo año, se recurrió a un despliegue de seguridad privada porque no se alcanzó el número de voluntarios necesarios, según USPB. «Tuvieron que movilizar a todo el turno (unos 30 policías) y no se pudo atender como es debido las llamadas al 092», expuso Víctor García, «esto tiene efectos en todos los agentes que patrullan en la vía pública porque si mandas a todos los agentes a cubrir la cabalgata, desvistes un santo para vestir a otro».
Según datos oficiales, la Policía Local reciba cada año alrededor de 80.000 llamadas por parte de la ciudadanía, a lo que hay que sumar otras 24.000 que proceden del Centro Coordinador de Emergencias de Canarias 1-1-2.
«Lo que pedimos es que Darias tome cartas en el asunto», insistió el representante de la Unión Sindical de Policía y Bomberos (USPB), «si en las cabalgatas y otros actos multitudinarios faltan efectivos policiales, solo será achacable a la Corporación».
Tradicionalmente se ha dicho que un acto como el de una cabalgata de carnaval requiere del despliegue de unos 150 agentes. Si no hubiera ningún voluntario, cosa que tampoco ocurre, y se destinara solo el turno, serían alrededor de una treintena de policías los que se tendrían que hacer con el control de todo lo que ocurre en la cabalgata.
Por eso se recurre a seguridad privada y, por eso mismo, el Ayuntamiento ya no facilita nunca la cifra de agentes que despliega en los principales actos que se celebran en la ciudad. No pasa lo mismo con el Cuerpo Nacional de Policía que sí ofrece el detalle de los refuerzos. En el cabalgata de Reyes Magos de este año, por ejemplo, la Policía Nacional aportó un refuerzo de un centenar de agentes en la capital grancanaria.
Esta es la deuda: 1,5 millones de euros
La deuda que el Consistorio tiene con policías, bomberos y agentes de movilidad supera los 1,5 millones de euros porque el nivel de celebración de eventos se ha disparado y, con ello, el de requerimientos de seguridad: se ha pasado de 70 en 2013 a 270 en el año 2023.
Esto supone un incrementos de actos en las calles de un 286% en los últimos diez años.
Lo adeudado es por las horas extras de abril a diciembre del año pasado por no activarse, según USPB, el acuerdo que permitía disponer de cuatro jornadas voluntarias de cada policía para eventos y refuerzos extraordinarios.
El coste de la aplicación de esta medida, cuya tramitación sigue atascada en las oficinas municipales, está presupuestado en 528.782 euros.
Javier Darriba