¿Se imaginó alguna vez ganar el concurso del Norte?
No, nunca se nos pasó por la mente llegar a lo más alto del concurso del Norte; estamos en una nube porque nunca pensamos que iba a llegar este momento.
¿Tiene el mismo mérito ganar en el Norte sin Tiralenguas o Trapaseros?
Se nota la ausencia de murgas fuertes como son Tiralenguas y Trapaseros. Las murgas más pequeñas nos hemos ido haciendo un huequito en ese en ese podium y claramente es un poco más fácil acceder a esos puestos altos por la ausencia sobre todo de Trapaseros, que era la murga más laureada en el Norte.
Difícil papeleta para Irónicos. Accésit en Santa Cruz y segundos en el Norte, por lo que no tendrán el ‘pase de oro’ para repetir en la capital en 2025.
A lo mejor ellos (Irónicos) venían también arrastrando el cansancio ya de Santa Cruz, y eso pasa factura; quieras o no, también se pierde el factor sorpresa en el Norte. Me pareció merecidísimo su pase a la final. En Santa Cruz me encantaron. A lo mejor se les notaba aquí (en el concurso celebrado en Garachico) más cansados de todo el esfuerzo, todo el trabajo que han tenido que soltar.
¿Por qué sacar una murga?
La idea de sacar una murga me viene a mí de chiquita, cuando mi madre fundó ella en su momento una murga también femenina, Las Que Faltaban, que salieron en Icod de los Vinos en el año 1986, que fue la segunda femenina de Tenerife; también fundó en 1984 la femenina infantil Chaladas, que es de la que tomamos el nombre cuando salimos nosotras en 2019. Yo pequeña decía que yo quería ser como mi madre, que quería tener una murga. Llegó un año que junto con la presidenta de Chaladas estábamos viendo un ensayo de la infantil Tiralengüines (en la que también había salido, y en 2017 y 2018 fue componente de Triquikonas) y salió el tema y nos planteamos hacer una murga, no eres capaz. La primera persona que nos vimos cuando nos bajamos del coche después de hacer ese reto personal fue a Judo Lorenzo. Le dijimos: oye, vamos a hacer esto, ¿tú te animas?. Y ni se lo pensó. Y contamos con él. Era más bien para salir en Carnaval pero nunca imaginamos a dónde íbamos a llegar; nunca se pasó por la mente.
¿Por qué un mínimo tan corto de 15 componentes en el Norte?
Eso lo han pedido murgas con componentes más reducidos porque el concurso del Norte está bastante en la cuerda floja. Y eso se propuso a modo de al menos que pueda salir una murga más y evitar la desaparición de más murgas en el Norte, aunque sea con 15 componentes. Sí que soy partidaria de los 20 componentes como mínimo, como se ha hecho siempre, pero es verdad que sin esas murgas con menos componentes no habría concurso y también son parte importante en el concurso del Norte, porque mantienen vivo el concurso.
¿Y en el formato de dos canciones en fase y una en final?
Creo que se va a mantener a tres por capacidad de grupos locales. Yo soy partidaria de cuatro temas, porque al final, y el otro día también lo comprobamos, terminamos de cantar el tema de la final y como que necesitamos o queremos más. También mucha gente nos lo ha dicho, que quieren oír más. Soy partidaria del formato de cuatro temas, pero se hace a tres para ayudar un poco al compañero.
¿Y hacerlo como en Las Palmas: ensayan tres y repiten uno en final, para que sean dos canciones?
Antiguamente se hacía así en el Norte… Pero tampoco soy partidaria de eso porque es como volver a escuchar lo mismo, un poco repetitivo y la gente también quiere cosas nuevas, quiere escuchar pues algo más, no otra vez lo mismo.
Si van a Santa Cruz y el próximo año no ganan en el Norte, ¿Se plantearían dejar el certamen comarcal para volver a la capital?
La verdad que esa idea por nuestra cabeza todavía no ha pasado, tendríamos que vernos en la tesitura como se han visto también otras murgas; como ha ocurrido con Tiralenguas o Trapaseros. Tendríamos que vernos también en la tesitura de ellos. Nosotras llevamos muy poquito tiempo con este concurso, somos muy jóvenes. Ellos son murgas veteranas, fundadoras del concurso y quieras o no pues llevan un poco más cascados, por así decirlo, en el sentido de que han recibido muchos palos. Nosotras por ahora nos podrán dar palos que por ahora los aguantamos; los entiendo a ellos y que después de tantos años tomen esa decisión, con el dolor que supone cuando han sido los fundadores del concurso. Entiendo las dos partes: quienes quieren evolucionar y quienes no quieren dejar el Norte.
¿Quiénes son Chaladas?
Chaladas es un grupo de amigas, una familia más que una murga. Más allá de concursos, lo que más nos gusta es Carnaval de la calle, donde más disfrutamos y vemos la aceptación con la gente. Ese es nuestro mayor premio, donde se ve la unión que tenemos y que hacemos familia en las noches que pasamos en el local. Ese día a día es nuestro desahogo, lo mejor para evadirnos de problemas externos. La murga es nuestra zona de confort.
¿Es más del estilo de Triquikonas o de Burlonas?
Los dos; el humor y también la crítica. Una murga es ese conjunto. Las voces de Burlonas me gustan bastante, están afinadas y tienen mucha potencia, y el humor de Triquikonas.
¿Chaladas es más humor o crítica?
Desde primer año intentamos buscar en nuestro repertorio la crítica con ironía y sarcasmo, se nos ha quedado atrás estos dos últimos años y cuando terminamos el repertorio siempre digo, ¡ay Dios! se nos quedó atrás otra vez hacer algo. Hacer humor es muy complicado por eso nos tiramos más por la crítica.
Una murga del Norte.
Tiralengüines.
Una murga de Santa Cruz.
Diablos Locos y Triquikonas.
¿Un director o directora?
Almudena Domínguez.
¿Un director musical o directora musical?
Pablito Moreno, de Bambones.
Un letrista.
Nisa Couto y Yone Expósito.
Humberto Gonar