La emoción y el ritmo contagioso de la comparsa Los Joroperos elevaron la energía de los aficionados durante el descanso del emocionante partido de Liga que enfrentó al Club Baloncesto Canarias y al Casademont Zaragoza. El recinto, ubicado en el Santiago Martín, vibró al son de la música y el baile, convirtiendo el intermedio en un espectáculo inolvidable.
Desde el primer compás, la comparsa capturó la atención de todos los presentes, quienes no pudieron resistirse a unirse a la fiesta. Con un vestuario colorido y coreografías dinámicas, Los Joroperos lograron crear un ambiente festivo que complementó a la perfección la intensidad del encuentro deportivo.
El partido, que culminó con una victoria para el Canarias, no solo fue un triunfo en la cancha, sino también una celebración de la cultura y la alegría que caracteriza a la isla. La actuación de la comparsa no solo animó a los espectadores, sino que también unió a la comunidad en torno a un evento que combina el deporte con las tradiciones locales.
La afición, visiblemente emocionada, aplaudió y cantó junto a Los Joroperos, quienes se despidieron del escenario dejando una estela de energía positiva y entusiasmo. Este tipo de iniciativas no solo enriquecen la experiencia de los aficionados, sino que también promueven el talento artístico local.
Con esta victoria, el Club Baloncesto Canarias comienza el año con el pie derecho, y la actuación de la comparsa ha sido el broche de oro para una noche que quedará en el recuerdo de todos los asistentes. La combinación de deporte y cultura sigue demostrando ser un elemento clave para fortalecer los lazos entre los equipos y su afición.