El adelanto del programa especial que tendrá el carnaval capitalino de 2021 se hizo ayer a instancias de una comparecencia solicitada por el concejal del PP Ignacio Guerra, quien se interesó por la gestión de los 400.000 euros que se destinan a los grupos de la fiesta. En su opinión, debe haber un apoyo decidido a la industria de la fiesta.
Por su lado, la portavoz de Ciudadanos, Lidia Cáceres, indicó que la pandemia daba la oportunidad para que el Ayuntamiento reflexione sobre el futuro de los carnavales y apueste por la deslocalización y la profesionalización de los talleres para evitar tener que contratar en el exterior determinados aspectos de la fiesta. La concejala recordó que «hay una cierta falta de arraigo en esta ciudad con su fiesta» y aconsejó al gobierno municipal que aproveche para «estudiar cómo salir más fuerte de esto».
Por su parte, el concejal de Coalición Canaria-Unidos por Gran Canaria David Suárez aseguró que la programación propuesta por el Ayuntamiento nos sitúa «ante el carnaval reciclado, ya que su intención es que se celebre con los vestuarios del año pasado, actuaciones de años anteriores y solo un par de actos para que el gobierno justifique su gestión». El edil nacionalista advirtió de que «mientras tanto, los comercios que viven de los ingresos que recaudan en estas fechas, cierran o amenazan con cerrar, con las consecuencias que ello tiene para las miles de personas que dependen de esa inyección económica».
La concejala no adscrita Beatriz Correas criticó que «se hayan olvidado de la ciudadanía y, sobre todo, de los jóvenes, cuyos exámenes coinciden con las fechas de celebración de la fiesta».
Javier Darriba 