El solar que albergará los actos centrales de la próxima edición del carnaval de Las Palmas de Gran Canaria ya ha sido allanado por parte de la Autoridad Portuaria, entidad responsable de la primera fase de los trabajos. La parcela espera ahora por el Ayuntamiento capitalino, que tiene que entregar un informe que, aseguran desde el Puerto, es el único requisito para empezar a trabajar en el epicentro de la fiesta.

Faltan solo 45 días para que uno de los eventos principales de la ciudad, Fiesta de Interés Turístico Internacional, haga levantar su telón y de paso a una celebración que se prorrogará hasta el 18 de febrero.

Su mudanza al Puerto requiere de ciertos trabajos por parte del gobierno de la ciudad que todavía no se proyectan en la zona, según indican fuentes portuarias porque el Ayuntamiento aún no les ha trasladado un informe de la Junta de Seguridad que les habilite para entregarles la parcela y que se pongan manos a la obra.

Los muros que rodeaban los antiguos tanques de la BP ya están en el suelo. Y en los últimos días las excavadoras de la contrata encargada de los trabajos han ido preparando la zona para habilitar los espacios en los que el carnaval vivirá los próximos meses su exilio del parque de Santa Catalina, imposición derivada de los retrasos en la obra de la MetroGuagua.

«Solo falta ese informe de la Junta de Seguridad para poder entregarles la parcela. Desde que llegue ese informe, al día siguiente, o como mucho en dos días, ya estará en sus manos para acometer las obras que sean necesarias», indican desde el Puerto.

Se trata de acondicionar un solar de 14.800 metros cuadrados que aspira a llegar en su día cumbre, el de la celebración de la gala drag, a un aforo total de 9.000 espectadores. Eso, evidentemente, obligará a una serie de trabajos que permitan adecuar la parcela a las necesidades logísticas que requiere.

Entre ellas están los propios accesos al que será, en principio solo durante 2024, el epicentro de la multitudinaria celebración. Uno de los puntos negros es el de preparar accesos alternativos a la entrada natural del Puerto, donde se encuentra los puestos aduaneros de la Guardia Civil. La recta en la que comienza la calle Juan Domínguez Pérez, vía principal de entrada a El Sebadal, será el lugar en el que se anclen, a través de varias entradas, las puertas que den paso a la explanada en la que se celebrarán las principales galas carnavaleras.

Esta es una de las cuestiones que exige más allá de las normativas que lo imponen, un desarrollo de seguridad bien armado para el traslado de la parcela por un periodo de un año. El acceso al Puerto de Las Palmas de Gran Canaria es una zona especialmente delicada de la ciudad, tanto en las vías de ingreso como en las de salida. Las medidas de seguridad y los problemas de circulación que se suelen dar en esa zona hacen que requiera de una especial atención.

Desde el Ayuntamiento de Las Palmas de Gran Canaria no se da más información que la respuesta de que esta primera fase de trabajo compete al Puerto y que en breve llegará el desembarco municipal en las tareas de adaptación del espacio.Eso sí, se repite que se está en «estrecha colaboración» con la Autoridad Portuaria en este tema.

La celebración de la próxima edición del carnaval de Las Palmas de Gran Canaria en el Puerto, y su expansión por la plaza de Los Patos y la de Manuel Becerra, ha sido vendida como el retorno de la fiesta a La Isleta, el barrió que la vio nacer tras el ocaso de la dictadura en 1977.

Lo cierto es que este retorno será breve, porque las obras para mejorar la circulación en la ciudad que se van a acometer en Belén María, impedirán probablemente que en 2025 este «circuito carnavalero», como lo definió el director artístico Josué Quevedo, vuelva a esa zona de la ciudad, a la espera aún de saber si da resultado la fórmula propuesta para esta edición.

David Ojeda Canarias7 - Noticias de última hora en Canarias

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *