Más de una decena de grupos carnavaleros de Puerto de la Cruz y también de Santa Cruz de Tenerife desfilaron ayer en el pasacalle que puso el broche al Carnaval de Verano de Canarias en su VIII edición.
El Paseo de Colón, la vía más turística de la ciudad, se llenó de residentes y visitantes que se contagiaron del ritmo y de la emoción que les ponen los más carnavaleros a la fiesta más internacional que se celebra en las islas.
La comparsa Río Orinoco abrió el coso, seguido por el Grupo La Palma, Son Bahía, Essavan, la murga Masquepotras, Moana, la batucada Baraberé, el grupo coreográfico Epsylon, la comparsa Carabao Guayana y Guarani Kaiowa, cerrando el desfile la Comparsa Rumberos.
También, eso sí, subidos a las carrozas, desfilaron los ocho candidatos que participaron en la gala del único rey del Carnaval de las islas, en la que fue coronado Jonay Anceaume con la fantasía Malamor de la diseñadora portuense Juliana Serrano.
Durante una hora y media se vivió la magia del Carnaval en las calles del municipio, que ya pone su mirada en el horizonte de las carnestolendas invernales para volver a compartir el talento de tantos profesionales y también de familias enteras, que se vuelcan en la fiesta que cada año tiene su cita en la ciudad turística y que en 2024 tendrá como temática, elegida en votación popular, el mundo del festival de la canción Eurovisión.
Al finalizar el coso, comenzó la Carnival Summer Party, organizada junto a Marcha FM, que puso la mejor música para despedir el Carnaval de Verano hasta el próximo año.
