«Soy tremendamente exigente conmigo y con mi equipo porque quiero que todo lo que yo digo se cumpla a rajatabla y eso se traduce en expectativas más altas y más nervios para que la gente disfrute del Carnaval, que los concursos estén llenos de público, que todo el mundo se sienta cómodo y todo transcurra sin incidentes. Me gusta cumplir mis compromisos». Javier Caraballero, al frente del área por segundo año consecutivo, explica sus retos para este 2025.

Decisiones para 2025
El cambio de disposición del escenario en el recinto ferial para ganar aforo, traslado de la feria de atracciones, de la avenida marítima para estrenar la explanada del puerto son algunas de sus decisiones para a la nueva edición que arranca el viernes 31 de enero.

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Si tuviera que poner un debe en sus objetivo para 2025, Caraballero admite que no ha conseguido cambiar el calendario. En realidad, pretende adelantar el concurso de agrupaciones y mantenerlo en sábado, pero «tocar una pieza de la programación afecta al resto»., porque «tenemos un calendario hecho, consolidado… Eso significa que la fiesta ya funciona».

Sobre la mayor, la fecha de celebración del Carnaval, el concejal es contundente: «soy partidario poner una fecha fija para la celebración para que organización y grupos tengamos un respiro organizativo». Y tiene clara su preferencia respecto al calendario fijo: que empiece con la Cabalgata el último fin de semana de febrero y se prolongue la primera de marzo.

Equipo artístico
Respecto a los responsables de las galas, concursos y la escenografía, recuerda que el equipo se conformó hace un año, y por lo tanto tiene recorrido aún por delante. «El resultado en su primer año fue bastante bueno, aunque con cosas mejorables», y ahí se han empeñado de cara a la nueva oportunidad.

¿Jep Meléndez o Daniel Pagés?
El concejal lo tiene claro: «forman un buen tándem porque cada uno complementa al otro. Pagés tiene la visión de lo que es el Carnaval desde su faceta como diseñador y Jep controla muy bien lo que es el espectáculo y una creación artística. Es una buena combinación, no me decantaría por ninguno de los dos».

Respecto Nareme Melián, ilustrador que Caraballero elevó a escenógrafo ya en el Carnaval 2024, destaca su faceta creativa. «Cuando eres ilustrador es complicado crear un escenario sin contar una historia, porque va en el ADN artístico. Sin embargo el director artístico en un escenario no buscar una historia, sino un espacio que complemente la historia que vas a desarrollar. Y esa es la lucha, Nareme es bueno como escenógrafo y como cartelista».

Carnaval sin grupos
Cuando se le plantea al concejal qué es más importante, si el Carnaval de la calle o de los concursos, explica que «una parte no se entendería sin la obra. En las visitas a los grupos siempre me hago una autopregunta para inmediatamente respondérmela: ¿podría existir el Carnaval sin los grupos? La respuesta es sí, pero entonces no sería el de Santa Cruz de Tenerife».

«Si por algo se caracteriza el Carnaval de Santa Cruz es por sus grupos, porque hay un colectivo social detrás de la fiesta que mantiene viva la llama durante todo el año y eso es lo que lo hace diferente del resto de carnavales. Probablemente es lo que otros quisieran tener y no tienen, y luego la calle, donde no hay quien nos haga sombra», ensalza.

Artistas del Carnaval
Caraballero advierte de que las grandes orquestas que actúan en el Carnaval de Santa Cruz versionan los temas de toda la vida, «que han bailado las personas que tienen 80 años y los jóvenes que empiezan a salir ahora. El Carnaval chicharrero tiene su propia banda sonora, y es la que se va a potenciar en esta nueva edición», para admitir que el segundo Carnaval de Día de cada edición, que este año se celebra el sábado 9 de marzo, es el más importante… «son los fuegos artificiales de la fiesta».

La retahíla
Su Carnaval favorito.

Recuerdo mucho el de 2017, cuando hice el escenario por primera vez. Pero el más emocionante, el de 2012, porque gané mi reina infantil.

Un motivo del Carnaval.

Locos años 20, fue un escenario chulo, que diseñó Caballo de Troya.

Un director artístico.

Sergio García y Jaime Azpilicueta.

Un escenógrafo.

Carlos Sáenz, un mítico del Carnaval.

Un cartel del Carnaval.

1988, de Facundo Fierro, del año que nací yo.

Una murga.

Con permiso de todas, Los Rebeldes. Fue el primer pasacalle de murgas que recuerdo porque fue en 2003 cuando acudí a ver el concurso en la plaza de España, que se celebraba una final de murgas infantiles. Recuerdo que me llevó al concurso mi hermano Jorge y nos llovió.

¿Carnaval de calle o de los concursos?

La calle es el escenario natural del Carnaval, pero más cómodo es el recinto ferial.

Humberto Gonar

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