El carnaval de día de Vegueta no volverá a celebrarse nunca en las calles del casco antiguo de Las Palmas de Gran Canaria. Una noticia que ha saltado a la opinión pública después de que el Tribunal Superior de justicia de Canarias haya emitido un decreto por el que declara firme la sentencia dictada en mayo de 2023 por la que vetaban la celebración de este evento en esas calles. El objetivo, proteger a los vecinos de unos niveles de ruido “insoportables”.
En COPE Canarias nos hemos puesto en contacto con algunos vecinos de esa zona. Cuentan que han acogido esa decreto con gran satisfacción y que una vez más ha prevalecido el derecho al descanso que al ocio.
Josefa Sánchez, presidenta de la Asociación de Vecinos Triana-San Telmo, insiste en que esa noticia la han aceptado con gran satisfacción “porque cuando hablamos de una fiesta del carnaval estamos hablando de un evento que la gente lleva muchos años sufriendo”.
“El derecho al descanso de los vecinos no se había tenido en cuenta, pero sí la diversión del resto de la población. La sentencia ha sido muy justa y muy esperada, por lo que estamos muy orgullosos de ella”, añade.
La presidenta de la asociación de vecinos: “Lo triste es que el ayuntamiento haga fiestas en las zonas residenciales, porque no son espacios para acoger estos eventos multitudinarios, y menos hasta altas horas de la madrugada, porque se convierten en un auténtico desmadre. No se puede permitir ni en un casco histórico ni en una zona residencial, porque esto es inaceptable”.
Josefa Sánchez asegura que se trata de un problema que lleva mucho tiempo pasando y que el consistorio capitalino hace oídos sordos a la petición de parte de los habitantes que quieren descansar en sus casas y no quieren que prevalezca el ocio por encima de ellos.
“El consistorio no escucha a los vecinos y llevábamos mucho tiempo denunciándolo, pero no atendían a razones, solo quieran celebrar estos eventos multitudinarios y ruidosos. Como no nos hacían caso, tuvimos que recurrir a ir por la vía judicial porque no nos escuchaban”, señala.
La presidenta del colectivo recuerda que esta no es la primera sentencia que ganan al ayuntamiento de Las Palmas de Gran Canaria. “Ganamos la del carnaval de noche en Santa Catalina que finalmente se le dio la razón a los residentes después de que denunciaran los problemas que les estaba ocasionando”.
Destaca en nuestros micrófonos que “la sentencia fue clara y recoge perfectamente que estos actos con una gran afluencia de público no se pueden hacer en las zonas residenciales de la capital grancanaria. Ahora es el ayuntamiento el que debe saber cómo actuar en estos espacios”.
La presidenta de la asociación de vecinos asegura que debido a que han tenido muchas sentencias a su favor, la idea es que van a seguir denunciando lo que les parece injusto. Es decir, se quejarán de algunos eventos multitudinarios que afectan a su descanso en algunas zonas residenciales de la capital, como ocurre por ejemplo con la fiesta de la Víspera de Reyes en el entorno de Triana.
Josefa Sánchez asegura que no pueden revelar si van a ir en contra de esta multitudinaria y tradicional fiesta que cada 5 de enero acoge las distintas calles cerca del casco histórico de la capital.
Dice que se trata de un asunto que debe hablarse con distintos colectivos y vecinos “para ver qué pueden hacer y qué no. Nosotros apoyamos a los vecinos para que si se quieren reunir y denunciar lo hagan. Antes de una citación judicial no podemos hacer una declaración al respecto porque todo tiene su tiempo y hay que respetarlo”.
Josefa Sánchez ha manifestado que “ella no informa sobre lo que va a pasar, sino que se da a conocer cuando hay sentencias. Lo que está claro es que el ayuntamiento debe entender que no se pueden hacer estos actos multitudinarios en zonas residenciales y en horario nocturno, porque la ley del ruido español se debe cumplir. Si el ayuntamiento no lo cumplen, que no les extrañe que los vecinos hagan usos de sus derechos para defender su descanso”.
La portavoz de la asociación de vecinos Triana-San Telmo asegura que si fuese por ella misma, cancelaría las fiestas de la Víspera de Reyes, ya que en su opinión son “un perjuicio para todos los vecinos”.
“Yo soy una persona afectada, me indigna todos los años cuando veo que el alcalde se jacta en los periódicos que hay una afluencia de más 50.000 personas. No creo que sea una fiesta, sino una invasión de un barrio porque no podemos salir ni transitar con nuestros coches, hay calles cerradas, ruidos y música hasta latas horas de la madrugada, etc.
“No se puede priorizar el ganar dinero de unos que se lucran por las fiestas por encima de un derecho constitucional”.
Concluye insistiendo en que van “a seguir denunciando estos hechos, porque hay un movimiento social en Las Palmas de Gran Canaria de personas que están reclamando su derecho al descanso por encima del ocio”.