La confluencia de las calles Méndez Núñez con Robayna y avenida Veinticinco de Julio, en la capital tinerfeña, espacio popularmente conocido como zona del Orche, se prepara para experimentar una transformación radical con la creación de un nuevo lugar peatonal, libre de tráfico rodado y de aparcamientos. Obras de rehabilitación urbana que se prevén iniciar durante la tercera semana de abril, según anunció ayer el concejal de Infraestructuras del Ayuntamiento de Santa Cruz de Tenerife, Javier Rivero.
La Junta de Gobierno aprobó el pasado lunes la adjudicación de los trabajos a la empresa Conacon por un importe de 660.147 euros, contrato plurianual a firmar mañana y cuya conclusión se prevé para dentro de nueve meses, por lo que la nueva plaza de Robayna se concluirá en 2025.
“Este año, se destinarán 410.000 euros para hacer frente a la ejecución de la primera fase de las obras y, el próximo año, se abonará el resto. Se presentaron tres empresas para llevar a cabo el proyecto de acondicionamiento del espacio libre en esta zona y finalmente ganó Conacon, que se encargará de cerrar al tráfico el espacio para comenzar los trabajos y, luego, se pautará cómo se ejecutará, según espacios”, detalló el edil.
La intención del Ayuntamiento pasa por comenzar las obras de reforma por la zona colindante a los comercios, donde se encuentra la cafetería Orche, y, paulatinamente, ir prolongando su ejecución hacia el edificio del Gobierno Militar. “Aún no está decidido cómo se procederá, porque hay que pactar con la empresa, pero la idea es ir lo más rápido posible y evitar los cortes por tramos. Por ello, la intención es cerrar por completo este espacio y dejar el tránsito libre por las aceras durante la obra”, explicó Rivero.
PLAZA DE PIEDRA
En este sentido, el concejal añadió que, “cuando la reforma concluya, se pasará de un espacio público actualmente ocupado por coches a uno diáfano, con una amplia plaza con acabado en piedra natural canaria y una nueva zona de aparcamiento destinada a personas con movilidad reducida, además de la colocación de un nuevo paso de peatones en la avenida 25 de Julio. Igualmente, se mantendrá la farola central y se instalará nuevo mobiliario, como bancos y papeleras, junto a renovadas especies de árboles, que dotarán de sombra el futuro enclave urbano”.
Asimismo, se dejarán intacto los vados, pero se eliminarán los semáforos y se crearán paseos peatonales con la intención de que este lugar se convierta en un nudo de conectividad más agradable, fomentando el ocio y el esparcimiento de los ciudadanos. “Tenemos muy cerca la plaza de Weyler, que, por estar protegida como Bien de Interés Cultural (BIC), dificulta crear más espacios para juegos o para la familia. Por tanto, lo ques e busca con la peatonalización de la zona del Orche es pasar de un lugar ahora ocupado por coches a otro nuevo pensado para las personas disfrutando de la ciudad”, subrayó Rivero.
Respecto a si se prevé otras zonas cercanas para aparcamientos, tras eliminar las plazas de este lugar, el edil afirmó que “el objetivo es que esté libre de coches, por lo que es hora de que los vehículos que actualmente ocupan este espacio público, que parece un desguace sin control, desaparezcan para reconvertir este espacio en accesible”.
Mónica Ledesma 