Los expertos que asesoran al Gobierno de Canarias en la pandemia de covid-19 consideran que las restricciones en las islas deben mantenerse hasta el próximo miércoles, día 17, para evitar riesgos de brotes en el puente de carnaval, pese a la tendencia “muy positiva” en la reducción de contagios.
Hace ya meses que tanto Las Palmas de Gran Canaria como Santa Cruz de Tenerife -y las demás ciudades de las islas- anunciaron que este 2021 no habría carnavales, porque una fiesta multitudinaria de ese cariz resulta incompatible con las prevenciones de la covid-19.
Sin embargo, los expertos tienen miedo a las fiestas privadas que puedan organizarse este fin de semana y la noche del lunes (el Martes de Carnaval es festivo en Las Palmas de Gran Canaria, entre otros lugares), porque cuatro islas siguen en niveles de riesgo: Lanzarote en semáforo marrón (riesgo muy alto); Gran Canaria, en rojo (alto); y Tenerife y Fuerteventura, en naranja (riesgo).
El portavoz del comité científico del Gobierno canario, el catedrático de Salud Pública Lluis Serra, ha explicado a Efe que se observa una tendencia “muy positiva en todas las islas”, aunque la presión asistencial sigue siendo aún “muy importante en Lanzarote y significativa en Gran Canaria”, por lo que es evidente que los pasos siguientes están en la dirección de bajar de fase.
Mantener los toques de queda ayuda a contener esas posibles fiestas, ha recalcado Serra, quien ha añadido que, al ser el martes día festivo, la repercusión en muchos negocios será menor porque no abren.