La planificación de las galas del Carnaval en las Palmas de Gran Canaria a celebrar en el emblemático Estadio Insular ha generado una intensa polémica. El epicentro del debate radica en la posibilidad de talar o trasplantar árboles en la zona para adecuar el espacio al evento. La situación ha movilizado a vecinos, colectivos ecologistas y especialistas, quienes han manifestado su preocupación por las posibles consecuencias medioambientales.

Aunque la Concejalía de Parques y Jardines aún no cuenta con el informe final de la Sociedad de Promoción, la concejala de Carnaval, Inmaculada Medina, adelantó en una reunión con vecinos de la zona que algunos árboles serían trasplantados. Este anuncio ha encendido las alarmas de activistas y asociaciones defensoras del medio ambiente, quienes cuestionan la viabilidad e incluso la necesidad de esta acción.

“Trasplantar un árbol es perderlo”
En Herrera en COPE Gran Canaria, Rafael Molina Petit, presidente de la Asociación para la Defensa de los Árboles y el Paisaje, ADAPA, expresó su rechazo frontal a los trasplantes de los árboles afirmando que “si son árboles grandes se van a perder”, para ilustrar el problema se refirió a lo ocurrido en Tejeda, donde todos los árboles replantados del paseo principal “se perdieron” debido al método utilizado que supone “cortar raíces y copas”, un sistema que calificó de “peligroso porque supone el fin del árbol irremediablemente”.

Molina también subrayó el absurdo de eliminar árboles para un evento “de cuatro días” como es el Carnaval, recordando que “en otras ciudades, se hace todo lo contrario, renaturalizando los espacios en vez de destruirlo”.

Canaria insumisa plantea encadenarse a un árbol
El debate no solo se limita a los árboles, otro punto crítico es la posible eliminación del césped del estadio, una medida que también provoca el rechazo de colectivos medioambientales, Javier Marrero, portavoz de Canarias Insumisa y el perfil el Vigilante de los árboles en redes, asegura que se encadenará al Olivo “que se plantó como ejemplo de paz con el pueblo de Palestina”. Su argumento se centra en la necesidad de preservar los pocos espacios naturales que quedan en la ciudad frente a “intereses efímeros”.

Esta controversia refleja un dilema en las grandes ciudades: el conflicto entre la conservación del medio ambiente y la organización de vetos culturales de gran envergadura. Mientras las galas del Carnaval representan una tradición importante para la identidad local, muchos se preguntan si el precio a pagar es aceptable.

Por el momento, la decisión final sobre el futuro de los árboles, el Estadio Insular, está en el aire. En los próximos días hay una reunión entre colectivos vecinales y medioambientales para tomar una decisión consensuada; sin embargo, la creciente sensación de inestabilidad crece a medida que no se toma una decisión definitiva ni se conoce la posición final del consistorio.

Javier Benítez Archivo:Logo de la Cadena COPE.svg - Wikipedia, la enciclopedia libre

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *