En el concurso participarán un total de 7 formaciones entre las que se encuentran Los Quijotes de La Guancha, Las Gediondas, Los Cornucas Atómicos, Los Legías, Los Dibujos Animados se van de Fogalera, No tengo el chichi pa´ farolillos, y Los Esc@ndinabos, que subirán al escenario en ese orden.
El jurado encargado de fallar los premios en interpretación y presentación estará compuesto por Matías Alonso Alemán, humorista integrante del programa “En Otra Clave”; Carlos Morales, personaje del Carnaval de Candelaria La Rumbera Ultraperiférica; Juan José Pérez García, humorista “Juanito Panchín; y Carmen Cabeza, actriz, cómica y profesora de Lengua y Literatura. Mientras el jurado delibera el público podrá disfrutar de la actuación de la murga Guachinquietas y del cantante Besay Pérez.
Desde las dos de la mañana
Una familia de carnavaleros fieles a este concurso son los Barroso Rodríguez y en esta ocasión se colocaron en la cola en torno a las cuatro de la madrugada de este jueves. “Los primeros llegaron a las dos de la mañana, pero nos pusimos los cuartos”, comenta Bea, murguera de las de toda la vida y de las que se estrena este año como público de la Canción de la Risa.
Su madre es la que realmente es aficionada a este certamen que no se ha perdido en las últimas ediciones pero tal y como explica la joven “ya no puede hacer cola así que bajamos mis hermanos y yo”.
Acostumbrados a este método para la adquisición de localidades, la acampada nocturna no se hizo tan larga: “Mi hermano se dejó dormir en el suelo, otros viendo las murgas de Las Palmas de Gran Canaria, todos charlando… al final se pasó rápido”.
A medida que iban avanzando las horas, la cola se fue haciendo más larga y llegó el momento de la apertura de taquillas y este grupo consiguió todas las localidades que necesitaban.
“En realidad es mejor así que la compra en internet como en el concurso de murgas, porque al final se queda gente fuera y los que las compran las revenden”, asegura Bea Barroso, percusionista de Marchilongas.
Eso sí, una cuestión no gustó nada a esta familia carnavalera: “Al recoger la entrada no podías elegir sitio, sino que había que hace otra después, es absurdo”, concluye aún con la voz tomada por los efectos de pasar la noche a la intemperie.
Humberto Gonar / María Plasencia