La cantante y docente Isabel María Torón (Gran Canaria, 1944) será distinguida con uno de los premios especiales que otorga la Asociación Profesional de Compositores de Canarias -que agrupa a una veintena de creadores del sector en las Islas-, en la gala que tendrá lugar el próximo día 5 de junio en el edificio Miller de la capital grancanaria.
La grancanaria recibirá la distinción por su labor destacada en la creación, magisterio, interpretación, difusión y estudio de las músicas clásicas en Canarias. Será un premio merecido porque desde hace décadas Torón ha venido impartiendo clases a toda una pléyade de cantantes como lo hizo anteriormente su madre, la soprano Isabel Macario, en la prestigiosa academia ubicada en su vivienda del barrio de Ciudad Jardín de la capital grancanaria.
«Este premio me llena de orgullo porque me lo otorga el gremio de los músicos al que pertenezco, y me sirve de estímulo para seguir avanzando en uno de mis proyectos más apreciados en el que trabajo ahora: una publicación sobre mi madre y su labor docente y artística, la soprano Isabel Macario», señala ilusionada. «Además, que no haya sido a título póstumo, ha sido toda una sorpresa», enfatiza bromeando Torón.
Como su madre, que figuró en la directiva de la Sociedad Filarmónica de Las Palmas que fue fundada en 1845, la profesora ha formado parte como directiva de dicha sociedad y del jurado del Concurso Internacional de Canto Alfredo Kraus en varias ocasiones.
De su madre señala que ha heredado «el tesón y la perseverancia, así como la disciplina y la tenacidad, valores que considero imprescindibles en la formación de cualquier persona que desee dedicarse profesionalmente a la lírica».
También expresa que de su madre y su padre, el poeta adscrito a las corrientes del Modernismo, Saulo Torón, solo guarda entrañables recuerdos. «En ese rico ambiente intelectual que se prodigó en casa siendo niña a base de veladas musicales y literarias, crecí y se fue conformando este espíritu inconformista e independiente, fiel a mis principios. No me he casado con nadie, ni civilmente ni religiosamente», matiza Torón.
«Aquella casa siempre estuvo generosamente abierta a poetas y escritores, músicos, actores y actrices de la época, pensadores y pintores, incluso tras fallecer mi padre en 1974», recuerda esta artista de largo recorrido.
La también profesora durante varios cursos académicos en el Conservatorio de Las Palmas de Gran Canaria, fue la primera mujer gerente de la Concejalía de Cultura del ayuntamiento de la capital grancanaria siendo alcalde José Vicente León y Juan Guedes concejal de Cultura. Impulsó entonces programas pioneros que, unos años antes, ensayó en el marco del Plan Cultural del Cabildo que llevó a cabo a finales de los 70 del siglo de la mano de Alfonso Armas Ayala.
La cantante, que se ha labrado una trayectoria propia en el ámbito de la lírica, actualmente continúa colaborando en la organización de los conciertos vinculados a las temporadas de la Sociedad Filarmónica de Las Palmas de Gran Canaria, así como impartiendo clases.
Torón, que advierte que en Canarias «tenemos una excelente cantera de cantadores y cantadores tanto en el sector del folclore como en el de la lírica», recuerda que «en mi época suponía una temeridad y un atrevimiento para las mujeres grabar un disco, por ejemplo. Fui la primera mujer que cantó en unos carnavales en 1971 en la plaza de toros de Tenerife cuando las rondallas estaban constituidas solo por hombres. Sabía lo deseaba hacer y era muy decidida. Saltaba por encima de las trabas que se ponían a las mujeres», concluye.
Su premio, junto al que también recibirá María Mérida, pone el acento en las figuras femeninas que ha constribuido a generar el patrimonio musical de las islas de las últimas décadas. Referencias no siempre reconocidas.