Cinco sociedades del Carnaval chicharrero han secundado la iniciativa promovida por el exconcejal de Fiestas desde 1995 y hasta 2001 y en la actualidad responsable de Obras e Infraestructuras, Dámaso Arteaga, quien ha sumado apoyos entre los grupos de la fiesta de la máscara para reconocer la labor realizada por Juan Viñas Alonso durante más de tres décadas en la gerencia de la antigua Comisión de Fiestas y luego Organismo Autónomo.

La Sociedad Mamel’s, la Unión Artística ElCabo, La Peña del Lunes 1965, la Afilarmónica Ni Fú-Ni Fá y la murga Diablos Locos han sido los primeros cinco colectivos que han secundado la iniciativa liderada por Dámaso Arteaga en reconocimiento a «la relevante trayectoria y dedicación plena a esta ciudad en el ámbito del Carnaval, Fiestas de Mayo, Navidad y Reyes, siendo uno de los promotores de las fiestas en la capital».

El que fuera concejal de Fiestas con Juan Viñas defiende que se otorgue el título de Hijo Predilecto al que fuera su gerente como «reconocimiento de relevantes méritos personajes alcanzados en general del servicio a la colectividad, así como la expresión simbólica del sentimiento de congratulación del vecindario por contar con personalidades ligadas a él por vínculos de naturaleza, arraigo o de cualquier otra índole», como recoge el espíritu de la normativa que rige la concesión del título de Hijo Predilecto.

“Es justo reconocer su labor profesional en defensa de la Fiesta y también de la Cultura”
Dámaso Arteaga – Concejal de Fiestas 1995-2001 y responsable de Obras e Infraestructuras

El actual concejal de Obras e Infraestructuras del Ayuntamiento de Santa Cruz y entre 1995 y 2001 responsable del área de Fiestas, el nacionalista Dámaso Arteaga, explica que su propuesta encaminada a designar a Juan Viñas Alonso como Hijo Predilecto de la capital “viene a hacer justicia en honor a su trayectoria profesional y a su vinculación con la fiesta y la cultura en la ciudad durante más de treinta años de servicio como funcionario del ayuntamiento».

Para Arteaga, el que fuera gerente de Fiestas durante más de tres décadas jugó un papel destacado en la proyección internacional de la fiesta así como en la organización interna del Carnaval. Juan Viñas es un referente para la gestión administrativa de la ciudad en unos años complicados y complejos, y tiene el reconocimiento y respaldo de los grupos y colectivos que integran la familia del Carnaval de Santa Cruz».

«Con este reconocimiento se hace justicia al trabajo y a la dedicación de un empleado público que dedicó su vida profesional a su ciudad y a las fiestas, tanto al Carnaval como a Mayo», pone en valor Dámaso Arteaga.

El alcalde de Santa Cruz de Tenerife, José Manuel Bermúdez, por su parte, argumenta que «iniciar el expediente de honores a Juan Viñas es un acto de justicia colectiva con una de las personas fundamentales del Carnaval de esta ciudad y quien logró elevar nuestra fiesta por excelencia a la categoría de Interés Turístico Internacional» y añade que “por lo que puede considerarse el padre del Carnaval moderno, del que disfrutamos todos los carnavaleros y carnavaleras ahora y que contó, siempre, con el apoyo de la esencia de la fiesta; es decir, de todos los grupos».

Un carnavalero de pro
Juan Viñas Alonso nació el 25 de abril de 1934 en el barrio de Cuatro Torres, en el corazón del antiguo Santa Cruz; ya en 1962 entra al Ayuntamiento de su ciudad natal, coincidiendo con las segundas Fiestas de Invierno que se celebraban en la ciudad si bien fue diez años después, en 1972, cuando es designado de aquella concejalía en la que primer se puso en marcha la Comisión de Fiestas y más tarde la Comisión Mixta del Carnaval, que dio cabida a diferentes representantes de las modalidades de la fiesta, entre los que se encontraba Enrique González Bethencourt, de Ni Fú-Ni Fá; Manolo Monzón, de Rumberos, o Esteban Reyes, de Brasileiros, con el objetivo de sumar y diseñar el programa y evolución del Carnaval.

Entre los principales logros, en 1982 nace la Comisión Mixta del Carnaval, en el que participaba un representante de cada modalidad del Carnaval. En 1985 su impronta se deja notar, de la mano del alcalde Manuel Hermoso, con el salto de la gala desde el teatro Guimerá a la plaza de Toros; con la contratación de José Tamayo, que fue el encargado de dirigir las elecciones en el coso taurino entre 1985 y 1987, o la celebración de los bailes en la calle, con el récord Guinness que protagonizó la reina de la salsa, Celia Cruz, también en 1987, cuando se reunieron en las calles de la capital 250.000 personas.

A Juan Viñas Alonso también se debe la celebración de las cenas al aire libre que se organizó en las Fiestas de Mayo y que reunió el mayor número de participantes, con 10.000 personas, o la búsqueda de nuevos escenarios y actividades que han pretendido mostrar los valores de los vecinos de Santa Cruz como seña de identidad. Juan Viñas se sinónimo de Carnaval, de tradición y de sentido de pertenencia a Santa Cruz.

Humberto Gonar eldia.es

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