Minutos después de que el Gobierno de Canarias anunciara que Tenerife continuará en nivel 4 en la crisis sanitaria aunque se aplicarán las restricciones propias del nivel 2, el concejal de Fiestas, Alfonso Cabello, pidió prudencia y paciencia a los grupos del Carnaval antes de volver con todas las garantías a los locales de ensayo para preparar los concursos que se desarrollarán en junio, tras el aplazamiento acordado por la sexta ola.
El responsable de la organización explicó que «estamos en los últimos minutos antes de volver a los locales», para explicar que «parece que es propio de la democracia carnavalera esperar a que todos los grupos puedan retomar los preparativos, ya que hay algunos que sus sedes no reúnen ahora las condiciones para poder ensayar con plenas garantías». De ahí que Cabello solicite esperar a que el Gobierno de Canarias oficialice las nuevas normas acordadas ayer y así «volver todos juntos en esta desescalada al Carnaval».
Cabello insistió en pedir a los colectivos que se evite dar pasos en falso y realizar el regreso a los locales «al unísono», en lo que consideró el último esfuerzo que solicita a los grupos, para precisar que «todavía tenemos un tiempo de margen suficiente para preparar los repertorios con garantías», después de hacer prevalecer la seguridad sanitaria.
El portavoz del Gobierno canario, Antonio Olivera, explicó ayer que, en la actual situación, se establece una ocupación el 75 por ciento en aforos exteriores y del 50% en interiores. Cabe recordar que los grupos del Carnaval inauguraron los ensayos el 1 de noviembre de forma oficial tras las reuniones de octubre para preparar el reencuentro tras dos años. El 15 de diciembre, coincidiendo con la irrupción de la sexta ola del covid, los colectivos decidieron de forma unilateral suspender los ensayos, como ratificó el responsable de la organización.
El incremento de contagios motivó que Fiestas acordara aplazar el Carnaval de Santa Cruz a junio, después de haber explorado otras posibilidades para ir de la mano con Las Palmas de Gran Canaria, opción que desestimó ante la falta de garantías de que los grupos pudieran preparar sus repertorios, como así se ha demostrado. De hecho, de haberse celebrado los actos según el calendario tradicional, ya se habrían celebrado los concursos de murgas infantiles, de murgas adultas, de agrupaciones musicales, la gala infantil y hasta la elección de la reina de los mayores; de hecho, hoy habría sido el concurso de la Canción de la Risa y mañana, el de comparsas.
En las reuniones entre murgas y organización se estableció que se esperaría al 14 de marzo. Si ese día no se había podido volver a los locales, se limitaría el repertorio a un tema, –que habría supuesto la muerte de la final–. Al final la pandemia parece dar tregua para comenzar los ensayos de cara a un Carnaval de mínimos, mientras Mamelucos ya volvió a su local el miércoles, al igual que las comparsas Cariocas y Tropicana o la rondalla UA El Cabo, en aras a preparar sus compromisos artísticos, ajenos al repertorio de concurso.
Humberto Gonar 