La historia suele escribirse con nombres en masculino, pero la tradición popular guarda otros relatos. La Parranda Marinera de Buches de Arrecife quiso rescatar uno de ellos el pasado 28 de noviembre, en una charla impartida por Mari Carmen, compañera de la entidad, sobre el papel fundamental y, a menudo, olvidado, de la mujer en la historia de la parranda y de la mascarada de Los Buches.
La ponencia, enmarcada en el VI Encuentro de Mujeres en la Cultura de Canarias, ofreció un “recorrido apasionante (y desconocido para muchos)”, según explicó la agrupación en sus redes sociales. Un viaje que partió del siglo XIX, una época en la que, alrededor de 1880, existía una “igualdad estable” en la participación de ambos géneros, no solo en la fiesta, sino en la propia economía marítima de Arrecife, donde “mujeres y hombres sostuvieron, codo con codo”, la actividad portuaria.
Sin embargo, ese equilibrio se fue erosionando a lo largo del siglo XX debido a complejos procesos sociales, políticos y culturales, lo que condujo a una progresiva pérdida de presencia y participación femenina. El punto de inflexión llegó en la década de 1980, cuando, según expuso la charla, las mujeres de la entidad impulsaron una auténtica “revolución invisible”. Su lucha y tesón lograron restablecer la participación plena y en régimen de igualdad en todas las actividades de la agrupación, un legado que perdura hoy.
“En Los Buches, debajo de la careta no importa el género”, reivindica la entidad, subrayando el carácter igualitario actual de la mascarada. Para complementar la teoría con la práctica, al día siguiente, 29 de noviembre, la parranda abrió las puertas de su sede para ofrecer un taller de danzas folclóricas marineras de Lanzarote. Desde las más pequeñas hasta las más mayores, todas las participantes se animaron a bailar, en una muestra viva de la tradición.
La actividad cumplió también con el compromiso estatutario de la agrupación de difundir el patrimonio, incluyendo una breve presentación sobre qué es un buche —el utensilio de pesca transformado en instrumento musical y símbolo festivo— y la importancia de preservar estas tradiciones para Lanzarote y Canarias.
Esta doble jornada, organizada por la Asociación Mujeres en la Cultura – Canarias con la colaboración de Arrecife Cultura, no solo iluminó un capítulo olvidado de la historia local, sino que celebró el presente de una tradición que, gracias a esa “revolución invisible”, hoy se vive y se transmite con orgullo por mujeres y hombres por igual.