El lema “Ahora sí” resonó con más fuerza que nunca. Tras meses de espera, los integrantes de Los Valleiros se reunieron para dar vida al que será el primer latido de su propuesta para el próximo año. El ambiente no pudo ser más emotivo: se trataba del reencuentro de una familia.
La noche estuvo marcada por la alegría de volver a ver a los compañeros, de retomar los instrumentos y de sentir esa conexión única que solo se crea cuando un grupo late al unísono. Sin embargo, también hubo espacio para el sentimiento agridulce de recordar a aquellos compañeros que, por diversos motivos, no pudieron estar presentes en este primer encuentro. Su espíritu, aseguran, también se hizo sentir.
“El objetivo es claro y compartido por todos”, comentaba uno de los miembros al finalizar la jornada. “No se trata solo de aprender compases o coreografías; se trata de disfrutar del proceso, de fortalecer los lazos y de ser parte de esta gran familia que es Los Valleiros. Cada ensayo es una celebración”.
La esencia de Los Valleiros trasciende lo musical. Es un proyecto que se nutre de la camaradería, el esfuerzo colectivo y la pasión por la fiesta. Este primer ensayo es solo la semilla de lo que promete ser un espectáculo vibrante para el 2026, construido con ilusión, sudor y, sobre todo, mucho corazón.
El camino acaba de comenzar. Y con cada redoble, Los Valleiros no solo preparan su batucada; tejen los recuerdos que los unirán para siempre. La familia ya está en marcha.