La organización del Carnaval 2024 en el sur de Gran Canaria estará finalmente en manos de Option Productions S.L., después de que el Tribunal Económico Administrativo de Canarias (TEAC) desestimara el recurso presentado por la empresa Interdance S.L., que cuestionaba los criterios de adjudicación de los lotes correspondientes a las celebraciones.
Los eventos, divididos en dos bloques diferenciados, comprendían por un lado la gala principal en la Plaza Pública de la Diversidad Darío Jaén –celebrada entre el 7 y el 17 de marzo–, y por otro las cabalgatas, pasacalles, “mogollones” y demás actos multitudinarios. Tres empresas optaron inicialmente a su gestión: Option Productions S.L., la UTE “Maspalomas Events” –pendiente de constitución formal– y Out Now Events AIE.
Según la resolución del TEAC, los criterios de valoración técnica aplicados por el Ayuntamiento fueron determinantes. La propuesta de la UTE Maspalomas Events, que incluía una amplia cobertura mediática con galas retransmitidas, vídeos promocionales y hasta la participación de una influencer, obtuvo una puntuación de 25 sobre 49 puntos posibles en el primer lote, al considerar los técnicos municipales que carecía de mecanismos de control suficientes. En el segundo lote, la misma agrupación recibió 19 puntos.
Option Productions S.L., por su parte, alcanzó la mayor puntuación global, lo que llevó a la Mesa de Contratación a adjudicarle el servicio el pasado 1 de febrero mediante los decretos 568/2024 y 569/2024. La notificación de la adjudicación del primer lote se realizó el 15 de febrero, mientras que la del segundo se cursó con posterioridad.
Interdance S.L., parte de la UTE no seleccionada, presentó un recurso en el que alegaba que su oferta incluía artistas reales, sinopsis detalladas de cada acto y objetivos claros para todos los eventos. No obstante, el TEAC consideró que, si bien la documentación era correcta, la puntuación otorgada –asignada conforme a los baremos preestablecidos– no superaba la de la empresa ganadora.
La resolución subraya que los criterios de adjudicación fueron aplicados de forma reglamentaria, priorizando aspectos de control presupuestario, calidad artística y solvencia técnica. De este modo, se avala la decisión municipal y se cierra la puerta a cualquier cambio en la organización del Carnaval maspalomero de este año.
El fallo pone de relieve la complejidad de gestionar eventos de gran escala, donde la planificación burocrática y el rigor administrativo terminan definiendo, entre informes y puntuaciones, el desarrollo de una de las fiestas más populares de Canarias.