Desde la Parranda Marinera de Buches no pueden ocultar su alegría y orgullo. La familia buchera, ese núcleo que mantiene viva una de las tradiciones más singulares de las Islas Canarias, sigue creciendo. En un acto de vital importancia para la preservación cultural, la agrupación ha incorporado a 18 nuevos socios y socias, asegurando así que el relevo generacional está garantizado.
Esta incorporación no es un hecho casual, sino el fruto de un compromiso serio y estructurado. Los nuevos miembros han superado un exigente periodo de formación y prueba de cuatro meses de duración. Durante este tiempo, no solo han asistido diligentemente a los ensayos y actuaciones, sino que también se han formado en la historia y la idiosincrasia única de la Parranda, participando en jornadas de puertas abiertas para empaparse del espíritu buchero. Su elección final fue ratificada democráticamente en asamblea por los socios actuales.
La Parranda Marinera de Buches es una tradición bifásica que marca el ritmo del año en la isla. Durante medio año, del 8 de diciembre al final de la temporada de Carnaval, se convierten en Los Buches, saliendo a la calle con sus trajes de colores, sus vejigas de pescado y su canto de petición y broma. La otra mitad del año, desde San Isidro Labrador (15 de mayo) hasta el 8 de diciembre, son la Parranda Marinera, dedicándose al ensayo y a la conservación de su repertorio musical marinero.
Una tripulación que se renueva
La directiva de la Parranda ha hecho pública la lista de los nuevos tripulantes de este barco cultural, categorizados según los roles esenciales que componen la festividad:
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Cuatro chinijos o bucheritos: Fayna, Noa, Julieta y Nauzet. Los más pequeños, el futuro y la alegría de la fiesta.
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Dos zangalotas: Yaiza y Pauli Leon. Figuras clave en la recogida de las ofrendas durante las salidas.
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Cuatro danzantes: Marcela Natalia Delgado Villalba, Maria Del Mar Lemes Garcia, Stella Mendez Valderrama y el chinijo Pablo Delgado. Los encargados del baile y la coreografía que acompaña la música.
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Dos coristas: Teresa Montoya y Araceli Dominguez Rosario. Voces que enriquecerán las armonías de las canciones marineras.
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Tres tocadores: Antonio Martin Cabrera, Ayose Quevedo Caballero y Angel Jose Hernandez Morales. Los músicos que darán vida con sus instrumentos a las parrandas.
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Tres colaboradores: Alba Machado Gutiérrez, Ignacio y Pancho. El apoyo indispensable tras bambalinas para que todo funcione a la perfección.
Con esta inyección de nueva sangre, la Parranda Marinera de Buches no solo se fortalece numéricamente, sino que demuestra que las tradiones con profundo arraigo y significado social pueden evolucionar y atraer a las nuevas generaciones. El mensaje es claro y esperanzador: el sistema tradicional marinero de Lanzarote, con sus buches, su música y su alegría, tiene por delante un futuro lleno de vigor para seguir perviviendo.
¡Bienvenidos a bordo!