Con un mensaje cargado de humor y la actitud desenfadada que las caracteriza, la murga Malcriadas ha puesto a la venta su décimo de Lotería de Navidad, invitando a sus seguidores a sumarse a una tradición que une la ilusión de las fiestas con el apoyo a la cultura carnavalera. La agrupación, conocida por sus letras incisivas y su compromiso con la fiesta, utiliza esta iniciativa para financiar sus proyectos y mantener viva la magia de la murga fuera de temporada.
El anuncio, difundido a través de redes sociales, apela al ingenio y la complicidad del público: “¿Vas a dejar que se te escape el décimo ganador?”, cuestionan, acompañando la pregunta de emojis que refuerzan el tono festivo. La estrategia de comunicación mezcla el lenguaje cercano con referencias a los típicos “lamentos” posteriores al sorteo, creando una conexión inmediata con quienes reconocen en el Carnaval no solo una fiesta, sino un estilo de vida.
La venta de los décimos se realiza de forma directa, a través de mensajes privados a las redes de la murga, un método que permite mantener un trato personalizado con cada comprador. El precio, 23 euros), destinando los beneficios a cubrir gastos de vestuario, ensayos y producción artística de la agrupación.
Esta práctica, común entre agrupaciones carnavaleras, refuerza el vínculo con su base de seguidores y democratiza el apoyo a la cultura popular: cualquier persona, por modesta que sea su contribución, puede sentirse parte del proyecto. Además, el sorteo ofrece una oportunidad única de obtener un premio económico mientras se contribuye a que el humor, la crítica social y la música sigan sonando en las calles.
Para las Malcriadas, este tipo de acciones son también una forma de resistencia cultural: mantener activa a la murga incluso en meses donde el Carnaval no es protagonista, recordando que la fiesta se construye día a día, entre sorteo y sorteo, ensayo y ensayo.
El eslógan “la suerte sonríe a quien se adelanta” resume a la perfección la filosofía de una agrupación que nunca espera a que las oportunidades lleguen, sino que las crea con esfuerzo, talento y una pizca de mala leche bien entendida.