Desde muy pequeño, Kike Martín de León ya llevaba el ritmo de la murga en la sangre. Con apenas seis años, formó parte de Los Arretranquitos, dando sus primeros pasos en un mundo que terminaría por convertirse en su gran pasión. Dos décadas más tarde, en 2005, junto a un grupo de amigos de Desahuciados e Intoxicados, fundó en el barrio de Los Alonso la murga Afilarmónica Los Simplones, un proyecto que no solo marcó su vida, sino también la historia del Carnaval de Arrecife.
Un legado de pasión y compromiso
Este 2025, Los Simplones han sido reconocidos con el premio a la Mejor Interpretación en el Carnaval de Arrecife, un broche de oro para Kike Martín de León, quien anuncia su despedida como director tras 20 años al frente del grupo. Desde la agrupación, no han dudado en rendirle un emotivo homenaje: “En nombre de todos los que han formado y forman este colectivo, queremos expresarte nuestro más profundo agradecimiento por estos 20 años dedicados al frente de este grupo que tú mismo fundaste”.
“Mucho más que una murga”
Bajo su liderazgo, Los Simplones se convirtieron en una familia unida por la música, el humor y el compromiso social. “Nos has inculcado el sentimiento de lo que significa Simplones, siempre desde el respeto y haciéndonos ver que somos ‘mucho más que una murga'”, destacan en su mensaje. Su estilo innovador, su dedicación en cada ensayo y su capacidad para transmitir emoción a través de las letras han dejado una huella imborrable en todos los que han compartido escenario con él.
El adiós a la dirección, pero no a la murga
Aunque Kike deja el timón de la agrupación, su presencia seguirá siendo fundamental. “Tenemos la suerte de poder seguir disfrutando de tu magia en los arreglos, de tu seña de identidad en cada estrofa y de tu presencia en cada ensayo”, aseguran sus compañeros. Su influencia perdurará no solo en las canciones, sino en el espíritu de una murga que ha hecho reír, reflexionar y emocionar a todo un pueblo.
“¡Gracias por tanto!”
El mensaje de Los Simplones cierra con un contundente “¡Gracias por tanto!”, un reconocimiento a dos décadas de entrega, creatividad y amor por el Carnaval. Kike Martín de León deja un vacío difícil de llenar, pero también un legado que seguirá inspirando a las futuras generaciones de murgueros. Su historia, como bien dice la murga, es la prueba de que Los Simplones son, y siempre serán, mucho más que una murga.